Ya han empezado a ponerse las primeras señales con los puntos negros de la provincia de Alicante. Ya están presentes en la N332 en el tramo entre Benidorm y Altea, donde verdaderamente se dan cada día situaciones de peligro.
Pero lo cierto es que el peligro no cesa por más que las señales se repitan a lo largo de los 8 kilómetros que dura el punto de concentración de accidentes. Miles de vehículos ven circulan cada día por el tramo, sin duda uno de los más saturados de tráfico de toda la provincia. Un goteo incesante de vehículos llena de situaciones de riesgo a cada momento.